Las 8 cosas que se deben hacen en los primeros minutos de trabajo

1. Reflexionar

Lograr mejores resultados requiere de reflexionar sobre dónde has estado, dónde estás, hacia dónde vas y adónde quieres llegar.

Las personas exitosas se preguntan a sí mismas: ¿Qué logré para alcanzar mis metas esta semana o la semana anterior? ¿Cuál es el estado de mis actuales proyectos? ¿Qué necesito lograr hoy para seguir avanzando?

 2.  Detenerse un momento para estar consigo mismo

Si al llegar al trabajo te encuentras con los teléfonos sonando y la gente tratando de verte, se corre el riesgo de que otras personas establezcan tu agenda. 

Centrarse en sí mismo y estar completamente presente ayuda a lograr el día que esperas, en lugar de permitir que otros lo gestionen.

3. Ponerse cómodo

Al comienzo de la jornada laboral asegúrate de que la silla esté a la altura correcta y los elementos de uso frecuente estén a tu alcance. Asegúrate de tener una iluminación adecuada. Tu día será mejor si tu entorno es cómodo y funcional,

4. Revisar los pendientes, hacer los ajustes y planear mentalmente el día.

Esto les ayuda a recordar la necesidad de seguir el plan y concentrarse en las cosas que son realmente importantes, y no simplemente urgentes. El recorrer mentalmente el día ayuda a visualizar los objetivos. 

Además revise su agenda para evaluar si hay que cambiar o reorganizarse con la planificación del día.

5. Priorizar

Un resultado positivo de la reflexión inicial es la capacidad de priorizar las tareas “por hacer” y ver más allá de la lista.

6. Tomar tiempo para saludar al equipo

Esto es crítico si eres el líder, pero es importante más allá del rol que tengas.

Ser amigable a primera hora de la mañana hace que el lugar de trabajo sea más agradable y tu enfoque humanista será contagioso.

7. Observar y tener en cuenta el estado de ánimo del equipo

Por la mañana hay que buscar el momento para hablar brevemente con el equipo y asegurarse de que están comprometidos y motivados.

8. Controlar estratégicamente el correo electrónico

El correo electrónico distrae y quita tiempo. Suele hacernos sentir que estamos logrando cosas y en realidad otros manejan nuestra agenda”.